El escenario: visita al doctor con Baby Andrea
Había varias parejas esperando para entrar a alguno de los consultorios y una de ellas llevaba a un niño orgullosos representante de la diversidad neurológica en su modalidad de Trisomía 21 (Síndrome de Down para los iletrados), el padre era una persona amable pero con cara de no saber como había llegado ahí, la madre se veía algo harta. Un poco de small talk y nos enteramos que tiene otro par de hijos, uno de ellos de 19 años (sepa si con la misma mujer).
De pronto el niño que andaba por ahí se inclina hasta el piso y lo toca con la lengua (que elástico) y aunque esta acción no es muy recomendable, la respuesta de la madre es totalmente desproporcionada, gritándole al chamaquillo y al padre por igual, después exigiendo a los dos que no la voltearan a ver y finalmente inquiriendo al padre con un sonoro y repetido " No me estés chingando la madre".
xD Que risa. Maldita arpía. Resulta obvio que no soporta que su hijo sea como es. Se veía que estaba harta y que esta en un lugar que no desea.
Caray, Amniosentesis, señores. Aunque difícil, los niños con transtornos neurológicos ofrecen muchas posibilidades si se les trata adecuadamente y se les da un medio de cariño y apoyo. Claro que primero tienen que asumir a sus hijos tal y como son.
Algunas personas no deberían ser padres. Eje
Y cuidado con las mujeres que escogen. Que no sean arpías.
Cosmonauta
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